Es la primera vez que nuestro urbanita favorito participa en una siembra de la tradicional agricultura de la zona. Los garbanzos son protagonistas hoy de un nuevo capítulo donde David aprende sobre la calidad y la producción natural de la materia prima de Fuentesaúco.
A lo largo de su estancia en la población zamorana, descubre la tradición centenaria de «los espantes». Originaria de 1596 y que es celebrada cada año en el mes de julio. Donde participan los vecinos que tratan de espantar a las reses de toros que son dirigidos hasta el municipio por los caballistas. Un acto de rebeldía social de las clases humildes de la comarca de la Guareña en una época pasada. En la actualidad es un evento turístico que atrae a miles de espectadores.
Siendo tierra de producción leguminosa, la IGP (Indicación Geográfica Protegida) del garbanzo de Fuentesaúco ofrece una visión muy interesante de la actividad comercial que se realiza a su alrededor.
David encuentra el momento para probarlos y confirmar el magnífico sabor característico de estos garbanzos. Con chorizo, boletus, gambas… Mil opciones hay para disfrutarlos y deleitarse gastronómicamente.
Y como no podría ser de otra manera, los lugareños vuelve a acompañar a nuestro viajero por las localidades adyacentes de la comarca. Lugares como Villaescusa, Cañizal, Vallesa, Castrillo de la Guareña, Fuentelapeña y Vadillo de la Guareña. Todos pertenecientes al espacio natural protegido de «Las llanuras del Guareña» con más de 41 mil hectáreas y en donde localizar aves como la avutarda común, el aguilucho cenizo y el sisón.
Querido oyente, si quieres descubrir más sobre la fauna alada zamorana puedes escuchar el episodio donde David visitó la Reserva Regional de las Lagunas de Villafáfila.